Combatiendo el cáncer

Elena tiene 69 años y su hogar en estos momentos es la Casa del Sagrado Corazón de Málaga. Es ucraniana y llevaba 8 años viviendo en España cuando le detectaron un cáncer.

«Me vine a España para trabajar y así ayudar a mi familia que es muy pobre. Empecé a trabajar como interna en una casa, ayudando con las labores domésticas y cuidando a los mayores de la casa. Cuando me descubrieron un tumor de mama y ya no podía realizar mis labores como interna, no tenía ningún lugar en el que vivir mientras me realizaban el tratamiento, así que me vine al Cottolengo, donde me han acogido estupendamente y llevo ya 10 meses».

En su país de origen tiene un hijo y una hija, 5 nietos y una bisnieta. Ella es la única de su familia que reside en España y todo el dinero que ganaba lo enviaba a sus familiares «porque allí todo es muy caro, desde la comida, la ropa, todas las facturas y las necesidades básicas, en comparación con los sueldos».

Su caso no es el único, pues hemos tenido ya cuatro casos de señoras que trabajaban como internas en casas y se vinieron aquí cuando de repente les descubrieron un cáncer. Mientras han vivido en esta Casa, han recibido el tratamiento de quimioterapia o se han recuperado tras la intervención y una vez recuperadas han vuelto a trabajar. Es muy importante tener un lugar en el que vivir mientras no pueden trabajar, un lugar donde dormir, comer y sobre todo donde alguien te cuide cuando estás enfermo. Todas ellas son mujeres muy trabajadoras, colaboradoras y agradecidas de poder estar aquí, conscientes de su realidad.

Actualmente, Elena sigue con nosotros. Ha sido operada con éxito de su tumor de mama, ganándole así la batalla al cáncer.